Ha llegado el momento, Fantasmas será el nombre de esta nueva serie que pienso cuidar al máximo.
Hace ya algún tiempo, más de un año, empecé a trabajar este personaje en muchas localizaciones y siempre se me quedaba esa espina clavada por el resultado final. Creo que he conseguido el personaje que buscaba, y me ha costado más tiempo del esperado.
Esta técnica, además de tener cosas muy agradecidas, a veces te pide un pasito más. Encuentro en muchos trabajos, detalles que me gustaría ver de mejor forma y dibujo, y en muchas ocasiones prefiero seguir practicando hasta conseguir el resultado más adecuado. Eso mismo es lo que me ha sucedido con esta serie de fotografías del fantasma, y os voy a mostrar una pequeña historia sobre todo esto.
En un curso en Belchite el año pasado, y acompañado de Janleonardo Wollert y Gus Mercerat, fue cuando después de muchas prácticas en casa, pinté mi primer personaje en una buena localización.
Utilizando un driafragma (f/8), para conseguir que la sábana se iluminase lo menos posible, iluminé este personaje desde varios ángulos. La silueta negra fue el primer ejercicio, iluminando a contra el personaje. El simple hecho de dejar las piernas abiertas en el modelo, hubiese dibujado un espectro nada creíble. Este tipo de detalles son los grandes secretos que guarda la verdadera pintura de luz. El más mínimo error a la hora de mostrar un dibujo puede llegar a desmerecer mucho nuestro trabajo.
Una vez conseguido ese efecto de silueta, era necesario decorar al personaje con texturas diferentes, para eso, extendemos la sábana en todas las direcciones del modelo y a la vez pintándola desde fuera del encuadre, utilizando una linterna con zoom y dirigiendo la luz donde más nos interesa. Este ejercicio lleva algo de tiempo, debemos preparar la sábana para cubrir todo el alrededor del modelo, a la vez que la iluminamos fuera del plano de nuestra fotografía.
El dibujo no es malo, incluso me atrevería decir que está muy conseguido, pero descubrir este efecto tan concreto no es fácil. Tocaba seguir trabajando el personaje con diferentes iluminaciones.
En Castillitos (Cartagena), tuve la oportunidad de trabajar este nuevo personaje utilizando el mismo ejercicio de iluminación. En la pintura de luz, puedes tener un buen equipo fotográfico, puedes ser un matemático de la técnica, pero lo más importante es la habilidad que tengas con tus herramientas de luz. Digamos que los parámetros fotográficos pasan a un segundo plano. Los parámetros siempre son muy parecidos, aunque también depende mucho del ambiente que tengamos a nuestro alrededor. Por norma general, un diafragma (f/7.1) siempre nos dará un buen resultado, teniendo en cuenta la potencia de nuestra linterna y siendo cuidadoso en el ejercicio de ilumianción.
Se puede observar en este dibujo al personaje mucho más estilizado, y eso te lo enseña la técnica después de muchas prácticas. Somos nosotros mismos los que tenemos que tomar decisiones en nuestros dibujos, elegir el mejor personaje solo depende del fotógrafo. Este detalle es la gran virtud de la pintura de luz, pintando con luces en la oscuridad te conviertes en un elemento más dentro de tu trabajo, disfrutas mucho más si te introduces dentro del escenario y creas en la oscuridad con tus propias manos dibujos increíbles a base de luces. En ese sentido esta técnica no es comparable a ninguna otra. No encontraras nada parecido, pintar con luces en la oscuridad es pura participación y entrega absoluta en cada trabajo. Se acabó eso de hacer fotografía tocando los botoncitos y observando por el visor, aquí debes trabajar duro dentro del escenario.
Después de muchos trabajos experimentales, seguía sin estar convencido del personaje, y sabía que podía mejorar. Todo era cuestión de tiempo y esfuerzo encontrar los resultados más atractivos al ojo humano.
Otra opción que vi muy interesante era combinar varios personajes en el mismo trabajo y un ejemplo es esta foto que muestro a continuación. En este trabajo yo mismo hice de modelo y yo mismo me iluminé. Esto deja claro que en la pintura de luz, todo puede ser posible si realmente puedes conseguirlo. Se convierte en algo mucho más complicado, ya que al estar tapado por una sábana no ves absolutamente nada, no siquiera puedes ver el ángulo de la linterna para guiar un poco los movimientos de iluminación.
Después de muchos prácticas logré conseguir otro dibujo diferente del fantasma, y esta vez habían tres personajes. Para conseguir esto, no hace falta modelos ni ayuda, basta con repetir el mismo ejercicio las veces que creamos conveniente.
Entre ellos el dibujo es muy similar pero siempre distinto, esta es otra de las virtudes de la pintura de luz, dibujar varios personajes con linterna hace que todos se transformen en formas similares pero nunca serán copias unos de los otros. Todos tienen un encanto especial y todos se diferencian en detalles diferentes. La iluminación con linterna es así de caprichosa y eso siempre hay que disfrutarlo.
Un detalle muy importante para que nuestro personaje tenga aun más potencial es conseguir siempre un escenario en donde los fantasmas se encuentren sobre fondo negro u oscuro. Esta va a resaltar mucho más las formas de los fantasmas y a la vez nos podremos ahorrar muchos problemas de solape de luces que siempre desvirtúan la atención de nuestro trabajo.
Es este dibujo al ser yo mismo el modelo y el iluminador, requiere de mucha más concentración, y siempre teniendo un gran problema en cuenta. Nunca debemos enseñar la linterna a la cámara, de lo contrario aparecerán unas trazas de luz acompañando alrededor del fantasma que en muy pocas ocasiones quedan bien plasmadas. Para solucionar este problema, basta con adaptar a nuestra linterna un poco de cartulina negra tapando ese haz de luz a la cámara en forma de cono.
Son muchas las prácticas que he realizado sobre este personaje, muchas las fotos que me han servido para sacar conclusiones a la hora de perfeccionar estos fantasmas observando fotografías NO VÁLIDAS, pero a la vez son muy útiles para aprender de nuestros propios errores.
Si quieres disfrutar pintando con luces, debes saber que todas las fotografías mal pintadas te pueden servir para ir mejorando día a día. Esto te puede ayudar si sabes reconocer que esta técnica es pura experimentación hasta conseguir el resultado perfecto.
Esto demuestra que si tu intención es comerte el mundo en 2 meses dentro de esta técnica, tus propias fotografías te darán una patada en el culo, pecando de técnica y sutileza. Para ser un buen pintor de luz debes ser muy cuidadoso y respetar las normas. Este tipo de fotos con luces son muy dificiles de digerir, por eso tenemos qude intentar tratar al comportamiento de la manera más cuidadosa. De esa manera y utilizando la paciencia como instrumento pronto verás los resultados, pero sobre todo, muy pronto sentirás que conoces la verdadera técnica compleja y creativa que te permita jugar y comunicarte con las luces en la oscuridad.
Comparto con vosotros este trabajo con la compañía especial de Paco Candela quien me invitó a su casa y a la vez a esta localización de Alicante para trabajar los fantasmas de una manera justa y culminando un proyecto que solo acaba de empezar. Gracias a Eugenio Moya por su colaboración con los fantasmas. Un beso enorme a Chari por su trabajo como modelo, Victor, Mariam y Pepe.Pasé una noche muy agradable muchas gracias por la noche.
El fantasma ya tiene dibujo y razón de ser. En este mundo de cosas injustas y a veces surrealistas, te encuentras con todo tipo de fantasmas que llegan a asustar por su manera de ser, su conciencia esta manchada y sucia por la avaricia. Los fantasmas han llegado para quedarse, y tendré que tratarlos con mucho respeto, las formas quedan bien definidas y quiero seguir ese modelo porque me parece el más definido e interesante.
Técnica
Ya he comentado que hay dos maneras de pintar un fantasma, el autorretrato es difícil pero no imposible, y la prueba está en el ejemplo de la foto superior.
Cuando tienes a disposición algún modelo la cosa cambia, se convierte en una experiencia increíble dar forma a un ser de estas características utilizando una simple sábana de color blanco.
Las iluminaciones tienen que ser muy sutiles y controladas. Basta con utilizar una linterna de led muy sencilla y que emita poca luz. Empezar la iluminación desde un lado en la parte inferior y dar un paseo por todo el contorno del personaje con la linterna en una posición cenital, de arriba hacia abajo. La velocidad del movimiento depende de tu linterna y del diafragma elegido. Ya te comenté arriba que un diafragma (f/7.1) funciona muy bien, pero nunca olvides que en este sentido influyen muchos factores. Lo importante es el movimiento rodeando al personaje por todo su contorno. Cuidado también con tapar la fuente de luz de la linterna. Normalmente yo utilizo un encuadre contrapicado para resaltar el tamaño de los personajes, esto puede llegar a ser un problema, en esta posición nuestra cámara tiene más facilidad para ver la fuente de luz de nuestra linterna. Lo arreglamos rápido tapando la cabeza de la linterna con una linterna como ya os he comentado.
El escenario de la parte de atrás es inmejorable. Me gustaba más la idea de utilizar el edificio de fondo para resaltar sobre negro a los personajes, pero también por el detalle de la luna que aun le daba un aspecto más nocturno. Una localización muy buena en donde empieza la historia de estos fantasmas.
Ya conoces como iluminar a estos fantasmas, y por supuesto sin guardar ningún secreto. NO es mi intención guardar mi técnica como algo invisible. Nunca lo he hecho así y nunca lo haré.
No tengo miedo por compartir todos mis secretos, al contrario, lo que quiero es que todos conozcan la verdadera pintura de luz. Una técnica que es compleja por naturaleza, y que entendiendo sus virtudes podrás disfrutarla siempre, creando personajes en la oscuridad con un atrezzo sencillo.
Solo tienes que abrir la mente, comprender el comportamiento de las luces en la oscuridad, y cuando conozcas todo eso, podrás decir con la cabeza bien alta que conoces la verdadera pintura de luz creativa y compleja.
Un gran saludo a todos los amantes de la técnica y a los apasionados de la fotografía.
NOS VEMOS EN LA OSCURIDAD
